jueves, 17 de noviembre de 2011

Centro de Estudios de La Mujer en la Historia de América Latina

En las últimas décadas ha cobrado notable importancia el análisis crítico del desarrollo y participación de las mujeres en la historia; limitadas hasta entonces a un papel pasivo e intrascendente donde figuraron sólo como dato simbólico o anecdótico. En realidad, la historia formal ha significado un registro único de las actividades masculinas, interpretadas según valores masculinos.
El esfuerzo por reconstruir el pasado femenino, denominado hasta hoy historia de las mujeres, debe entenderse fundamentalmente como un modelo conceptual que permita descubrir y analizar el otro lado de la historia. Así mismo, la preeminencia que ha adquirido en las últimas décadas la historia social, posibilita una nueva lectura de los distintos procesos sociales y económicos que ha vivido América Latina vinculados al estudio de género.
El aporte interdisciplinario orientado a la investigación del papel que desempeñaron las mujeres, su situación, pensamientos y acciones, admite constatar desafíos metodológicos y conceptuales. El primer desafío es afirmar que la mujer tiene una historia. El otro, es la carencia de fuentes, y las que existen son en su mayoría complejas y contradictorias puesto que han recogido e interpretados acciones y valores masculinos. El reto consiste en trascender la búsqueda de datos que puedan ser ubicados en la historia formal, hacia una nueva concepción y manera de entender la historia.
Sin embargo, no se trata de escribir una "historia compensatoria" a partir de aquellas mujeres notables que hicieron caso omiso a las normas establecidas; tampoco hacer de la "historia de la contribución", el tema central de la historia de las mujeres, puesto que las elimina como sujeto histórico y objeto de estudio.
En esta perspectiva en noviembre de 1998Sara Beatriz Guardia, fundó conjuntamente con un grupos deinvestigadoras (es) procedentes de universidades e instituciones de varios países de América Latina, Europa, y Estados Unidos, el Centro de Estudios La Mujer en la Historia de América Latina, CEMHAL, con el propósito de promover el estudio de la historia de las mujeres en América Latina. 


Objetivos

Fomentar el estudio de la historia desde una perspectiva de género.
Promover un campo de estudio interdisciplinario de la historia de las mujeres en América Latina.
Difundir trabajos y libros relativos al tema.
Promover y realizar encuentros internacionales.
Apoyar la investigación a través de debates y encuentros.
Brindar asesoría.
Fortalecer y coordinar el intercambio de investigadoras (es) de diferentes países.  



miércoles, 16 de noviembre de 2011

PROMOCIÓN Y ANIMACIÓN A LA LECTURA Y LA ESCRITURA

Comparto estos enlaces a sitios que promocionan la lectura y la escritura

http://www.jitanjafora.org.ar/

http://www.alija.org.ar/

http://culturalij.wordpress.com/




A leer y a investigar, a escribir y a compartir! A disfrutar!

jueves, 10 de noviembre de 2011

PONENCIA DE ANYELÉN EN EL PARLAMENTO JUVENIL DEL MERCOSUR

CLUB DE REGATAS
Más de 200 alumnos debatirán en el Parlamento Juvenil del MERCOSUR
El Parlamento Juvenil del MERCOSUR se reunirá este jueves 10 de noviembre, desde las 8.30, en el Salón Dorado del Club de Regatas Corrientes. Allí, más de 200 alumnos de toda la provincia debatirán acerca de: Inclusión educativa, Género, Jóvenes y trabajo, Derechos humanos, Participación política y Centro de Estudiantes, Comunicación y medios y Derecho a la Salud.
El II Encuentro Provincial del Parlamento Juvenil contará con la presencia de autoridades del Ministerio de Educación de la Provincia de Corrientes y referentes nacionales del proyecto que es ejecutado por la Dirección de Políticas Socioeducativas. 

Este año el enfoque del proyecto Parlamento Juvenil esta puesto en construir desde la participación de los jóvenes, desde sus debates en torno a las problemáticas locales, diagnosticar las mismas agudizando la tarea investigativa, formar asociaciones y redes integradas de comunicación entre las distintos integrantes de la comunidad educativa, de gobierno o de la sociedad civil, apuntando a la concreción de los proyectos que tengan un anclaje territorial.

Durante el Encuentro se establecerá el panel: “¿Cómo participar para constituirse en protagonista cívico Comprometido?”. Las ponencias estarán a cargo de la alumna Anyelen Magua (La Cruz), representante parlamentaria 2010; la Supervisora Técnica Susana Alcaraz y la Coordinadora Nacional de Parlamento Juvenil del MERCOSUR Verónica  Lorenzo.

Además se presentará la representación teatral “Muñecas de trapo”, a cargo de los alumnos de la Escuela Leloir de Corrientes.


Felicitaciones, Anyi, hija querida!

DÍA DE LA TRADICIÓN

El gaucho, de José Pedroni




Quisiera haber vivido mucho tiempo antes,
en nuestra hora prima, en nuestro día madre,
sólo para conocerte,
gaucho que cantabas con toda la sangre,
con todos los pájaros libres en la boca,
como ya no canta nadie,
nadie en el mundo, nadie, nadie.
Quisiera haber vivido en tu primer instante,
antes de la entrega de la pampa,
antes del encierro de los árboles.
Haber vivido en el alto mediodía de tu lance.
Haber corrido tu mañana, desandado tu tarde,
ambulado tu ocaso tras la voz del caracol del mate.
Río blando de boca, para orillar, errante,
y un puñal en el cielo, hecho de estrellas,
cada noche, al echarme.
Un puñal, una cruz, donde pensar en alguien.
Quisiera haber vivido en tu día grande,
el del rastreo de la libertad, la selva por delante.
Mía tu doma; mío tu duelo salvaje;
mío tu oído en la tierra;
míos tus ojos en las altas aves.
Haber tenido tu pulso para la sed, para el hambre.
En la boca sin miedo, ante el desierto,
tu grito penetrante.
Quisiera haber estado en todas las pulperías
junto a la guitarra amante
- voz, cintura y entrega de mujer entrañable-;
en todas las pulperías, sólo para esperarte;
sólo para abrirte cancha;
sólo para gritar ¡qué cante!, sólo para oírte cantar;
sólo para verte ir, libre, a cualquier parte:
la luna en tus virolas; en tu cuchillo el sol que nace;
en tu pañuelo al cuello, enjugada, la sangre.
Mía tu luz en la cara; mía tu esgrima en el aire;
mío tu numen; mío tu arte.
Antes del encierro de la aguada, donde,
entre junco y ave,
alguna vez te proyectó el ocaso, montado y con amante.
Antes del alambre con uñas, desgarrador de carnes.
Yo no tendría ahora este dolor cobarde.
Dormiríamos juntos, bajo la tierra madre.
¡Gaucho!
Gaucho que estás en todas partes, en la tierra,
en los árboles, en toda pisada de caballo,
en todo vuelo de ave...
¡Gaucho de la Cruz del Sur, sobre la pampa grande!
Las piernas entre ramas, los ojos anhelantes,
desmontados andamos de tu coraje,
sin cuchillo, sin lazo, por amarillas calles.
Viento ladrón de libertad y honra metido en los trigales.
¿Dónde la voz que diga "¡Por aquí!" en nuestra amarga tarde;
dónde la voz de valeroso rumbo que nos enanque
y el ala del sombrero otra vez nos levante?
Fuerza que se ha alejado de nosotros,
por el mañana, ¡hágase!.
Vénganos otra vez, ¡Oh gaucho!, tu coraje.
Vénganos tu conciencia del deber. Vénganos tu arranque.
Tu cuchillo de fuego. Tu altivez. Tu donaire.
Tu canto de jilguero. Tu baile.
Tu corazón de niño. Tu ángel.
¡Vénganos sobre el campo, por el aire!.

miércoles, 9 de noviembre de 2011

Ideas para leer y escribir en el siglo XXI, por Daniel Cassany

1. Abrir el aula a la realidad escrita del entorno. Que la gran diversidad de escritos de la calle, de la biblioteca, de la comunidad, entre en el aula. Que chicos y chicas aprendan a leer y escribir lo que realmente quieren poder hacer, que aprendan a leer lo que van a tener que comprender en su vida, que aprendan a escribir lo que el futuro les va a pedir. Que descubran el poder que tiene la lectura y la escritura. Que el mundo electrónico entre también en el aula y no sólo en algunas asignaturas: ¡en todas! En la clase de lengua, en la de matemáticas, en la de sociales...

2. Poner énfasis en el significado y en la interpretación. Leer significa comprender y escribir, hacer comprender. Importa menos oralizar unas líneas, hacer buena caligrafía o memorizar las reglas de
acentuación. Lo apasionante de leer es comprender lo que piensan los otros; lo fascinante de escribir es descubrir que los otros pueden leer -y comprender- lo que uno piensa. Busquemos la manera de que los alumnos gocen leyendo y escribiendo: así descubrirán su utilidad, su sentido y tendrán unas ganas locas de leer y escribir.

3. Leer y escribir en cooperación. Leer y escribir no son tareas individuales. Sí son procesos mentalmente individuales los actos de reseguir con los ojos un escrito y decodificar el significado de cada palabra o teclear y visualizar en la pantalla una tras otra las letras de una oración. Pero leer y escribir también es interpretar el significado que adquiere una palabra en cada contexto, buscar ideas y organizarlas con coherencia... Y todas estas operaciones las podemos realizar con nuestros compañeros: podemos leer y escribir en pareja, con coautores y colectores (¡curioso que no exista esta palabra en español!).

4. Hablar para leer y escribir. Leer y escribir no son tareas silenciosas. Al compartir con un colega la interpretación de un texto, autores y lectores verbalizan su pensamiento, lo contrastan con otros puntos de vista, lo razonan y justifican. Hablar constituye una poderosa herramienta para construir, negociar y socializar el significado. Hablar también permite desarrollar los procesos cognitivos implicados en el uso del lenguaje. Leer y escribir requiere poder hablar de lo que se comprende y de lo que se comunica. Dejemos que chicos y chicas hablen mientras leen o escriben. Estimulémosles a hacerlo.

5. Poner énfasis en el proceso. Leer no consiste en oralizar o subvocalizar un texto en carrerilla hasta el final; escribir consiste en completar hojas en blanco. ¡La escritura no entiende de improvisaciones! Comprender exige releer varias veces, intercambiar impresiones con otros, revisar las primeras hipótesis, matizar constantemente lo que se entiende. Escribir requiere hacer borradores y correcciones, elaborar ideas personales, adaptarse a cada audiencia. El aula no puede esconder esta realidad sobre el uso de la escritura: chicos y chicas deben reelaborar sus interpretaciones como si fueran esculturas de barro.

6. Leamos y escribamos con los chicos. Somos, los docentes, los lectores y los escritores más expertos que tiene el chico a su alcance. Pongámonos a leer y a escribir con ellos y para ellos, sus textos y nuestros textos. Mostremos en vivo cómo leemos y entendemos un texto, cómo nos equivocamos, cómo consultamos el diccionario, cómo formulamos hipótesis y luego las confirmamos o desechamos, cómo releemos y corregimos. Del mismo modo, mostremos cómo se buscan ideas, cómo se hace un mapa mental, cómo se revisa un primer borrador, cómo se reformula el texto paso a paso. Convirtamos el aula en un espacio vivo, en un taller de experimentación donde chicos y chicas puedan sentir en los poros de su piel el significado de las letras.

Daniel Cassany
Universitat Pompeu Fabra
Daniel Cassany i Comas

Doctor en Ciencias de la Educación. Profesor de la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona.
Ha impartido másters sobre didáctica de la lengua y composición escrita en universidades y centros educativos superiores de España, Europa y América.
Ha sido conferenciante invitado en congresos internacionales sobre lectura y escritura. Es autor de numerosos libros, artículos,conferencias, ponencias y comunicaciones sobre la comunicación escrita, redacción y didáctica de la lengua. Ha sido codirector de la revista Articles de didàctica de la llengua i de la literatura y es miembro del consejo editorial de varias revistas de lengua, lingüística y enseñanza de la lengua. Su investigación se centra en los ámbitos de la comprensión, la composición, el análisis del discurso y su enseñanza.



lunes, 6 de junio de 2011

RICARDO PIGLIA GANA EL RÓMULO GALLEGOS

El escritor argentino Ricardo Piglia (Buenos Aires, 1941) ha obtenido el XVII Premio Internacional de Novela Rómulo Gallegos por su novela Blanco nocturno. Carmen Boullosa, ganadora de la pasada edición y miembro del jurado, ha subrayado “el valor estético, el compromiso literario, la universalidad y la fuerte personalidad” del relato.



El Gobierno venezolano otorga desde 1967 este premio bianual (dotado con 70.000 euros) que han obtenido algunos de los mejores representantes de la literatura iberoamericana, como Gabriel García Márquez (1972), Carlos Fuentes (1977) o Arturo Uslar Pietri (1991). También han sido galardonados los escritores españoles Javier Marías (1995), Enrique Vila-Matas (2001) e Isaac Rosa (2005). Un total de 194 obras de 16 países participaron en la presente edición.


HASTA SIEMPRE , MAESTRO SÁBATO!

A ERNESTO SÁBATO, a nuestro querido don Ernesto, figura emblemática de la cultura argentina y autor de una obra reconocida en todo el mundo, científico, escritor, pintor, filósofo, hombre político, defensor inclaudicable de los derechos humanos, nuestro homenaje  y nuestro emocionado recuerdo.

"La dura realidad es una desoladora confusión de hermosos ideales y torpes realizaciones, pero siempre habrá algunos empecinados, héroes, santos y artistas, que en sus vidas y en sus obras alcanzan pedazos del Absoluto, ..." (Antes del fin, 1999)

¡Hasta siempre, querido maestro!



jueves, 7 de abril de 2011

"RESISTIR"- PRIMER AÑO PROFESORADO DE PORTUGUÉS

Fragmento de “La Resistencia” de Ernesto Sábato, querido escritor, quien celebrará su centenario en junio próximo

Son muy pocas las horas libres que nos deja el trabajo. Apenas un rápido desayuno que solemos tomar pensando ya en los problemas de la oficina, porque de tal modo nos vivimos como productores que nos estamos volviendo incapaces de detenernos ante una taza de café en las mañanas, o de unos mates compartidos. Y la vuelta a la casa, la hora de reunirnos con los amigos o la familia, o de estar en silencio como la naturaleza a esa misteriosa hora del atardecer que recuerda los cuadros de Millet, ¡tantas veces se nos pierde mirando televisión! Concentrados en algún canal, o haciendo zapping, parece que logramos una belleza o un placer que ya no descubrimos compartiendo un guiso o un vaso de vino o una sopa de caldo humeante que nos vincule a un amigo en una noche cualquiera.

Después de la lectura , el análisis y el comentario de este fragmento, los alumnos produjeron este texto, que deseamos compartir con ustedes.
 
 RESISTIR es:

Luchar por un objetivo, con esfuerzo y perseverancia, sin dejarnos vencer por los obstáculos que se presenten.
Vivir el día a día, esforzándonos por mejorar nuestras relaciones, porque existir es más que trabajar y trabajar.
Es lograr que cada día haya más compañerismo, y contar con valores que nos impulsen hacia nuestra meta.
                   Deternos frente a la exagerada exigencia de los tiempos que corren y nos corren. Pararnos frente a la vida , y evaluar lo que es realmente importante. No olvidarnos que somos seres humanos con sensibilidad y sentimientos, y no muñecos fáciles de distaer y entretener.
Es saber enfrentar los obstáculos, no abandonar nuestro propósito ante el primer problema, es luchar por lo que queremos.
Es convertir cada día en una hermosa canción.

Esperamos más aportes!!!!!!!

jueves, 17 de marzo de 2011

DISCURSO DE MARIO VARGAS LLOSA AL RECIBIR EL PREMIO NOBEL

Mario Vargas Llosa:
 


Elogio de la lectura y la ficción
Discurso Nobel
7 diciembre de 2010
 
Aprendí a leer a los cinco años, en la clase del hermano Justiniano, en el Colegio
de la Salle, en Cochabamba (Bolivia). Es la cosa más importante que me ha pasado en la vida. Casi setenta años después recuerdo con nitidez cómo esa magia, traducir las
palabras de los libros en imágenes, enriqueció mi vida, rompiendo las barreras del
tiempo y del espacio y permitiéndome viajar con el capitán Nemo veinte mil leguas de
viaje submarino, luchar junto a d’Artagnan, Athos, Portos y Aramís contra las intrigas
que amenazan a la Reina en los tiempos del sinuoso Richelieu, o arrastrarme por las
entrañas de París, convertido en Jean Valjean, con el cuerpo inerte de Marius a cuestas.

La lectura convertía el sueño en vida y la vida en sueño y ponía al alcance del
pedacito de hombre que era yo el universo de la literatura. Mi madre me contó que las
primeras cosas que escribí fueron continuaciones de las historias que leía pues me
apenaba que se terminaran o quería enmendarles el final. Y acaso sea eso lo que me he
pasado la vida haciendo sin saberlo: prolongando en el tiempo, mientras crecía,
maduraba y envejecía, las historias que llenaron mi infancia de exaltación y de
aventuras.

Me gustaría que mi madre estuviera aquí, ella que solía emocionarse y llorar
leyendo los poemas de Amado Nervo y de Pablo Neruda, y también el abuelo Pedro, de gran nariz y calva reluciente, que celebraba mis versos, y el tío Lucho que tanto me
animó a volcarme en cuerpo y alma a escribir aunque la literatura, en aquel tiempo y lugar, alimentara tan mal a sus cultores. Toda la vida he tenido a mi lado gentes así, que
me querían y alentaban, y me contagiaban su fe cuando dudaba. Gracias a ellos y, sin
duda, también, a mi terquedad y algo de suerte, he podido dedicar buena parte de mi
tiempo a esta pasión, vicio y maravilla que es escribir, crear una vida paralela donde
refugiarnos contra la adversidad, que vuelve natural lo extraordinario y extraordinario lo
natural, disipa el caos, embellece lo feo, eterniza el instante y torna la muerte un
espectáculo pasajero.

No era fácil escribir historias. Al volverse palabras, los proyectos se marchitaban
en el papel y las ideas e imágenes desfallecían. ¿Cómo reanimarlos? Por fortuna, allí
estaban los maestros para aprender de ellos y seguir su ejemplo. Flaubert me enseñó que el talento es una disciplina tenaz y una larga paciencia. Faulkner, que es la forma –la
escritura y la estructura– lo que engrandece o empobrece los temas. Martorell,
Cervantes, Dickens, Balzac, Tolstoi, Conrad, Thomas Mann, que el número y la
ambición son tan importantes en una novela como la destreza estilística y la estrategia
narrativa. Sartre, que las palabras son actos y que una novela, una obra de teatro, un
ensayo, comprometidos con la actualidad y las mejores opciones, pueden cambiar el
curso de la historia. Camus y Orwell, que una literatura desprovista de moral es
inhumana y Malraux que el heroísmo y la épica cabían en la actualidad tanto como en el
tiempo de los argonautas, la Odisea y la Ilíada.

Si convocara en este discurso a todos los escritores a los que debo algo o mucho
sus sombras nos sumirían en la oscuridad. Son innumerables. Además de revelarme los
secretos del oficio de contar, me hicieron explorar los abismos de lo humano, admirar
sus hazañas y horrorizarme con sus desvaríos. Fueron los amigos más serviciales, los
animadores de mi vocación, en cuyos libros descubrí que, aun en las peores
circunstancias, hay esperanzas y que vale la pena vivir, aunque fuera sólo porque sin la
vida no podríamos leer ni fantasear historias.
Algunas veces me pregunté si en países como el mío, con escasos lectores y tantos
pobres, analfabetos e injusticias, donde la cultura era privilegio de tan pocos, escribir no era un lujo solipsista. Pero estas dudas nunca asfixiaron mi vocación y seguí siempre escribiendo, incluso en aquellos períodos en que los trabajos alimenticios absorbían casi todo mi tiempo. Creo que hice lo justo, pues, si para que la literatura florezca en una sociedad fuera requisito alcanzar primero la alta cultura, la libertad, la prosperidad y la justicia, ella no hubiera existido nunca. Por el contrario, gracias a la literatura, a las conciencias que formó, a los deseos y anhelos que inspiró, al desencanto de lo real con que volvemos del viaje a una bella fantasía, la civilización es ahora menos cruel que cuando los contadores de cuentos comenzaron a humanizar la vida con sus fábulas.

Seríamos peores de lo que somos sin los buenos libros que leímos, más conformistas,
menos inquietos e insumisos y el espíritu crítico, motor del progreso, ni siquiera
existiría. Igual que escribir, leer es protestar contra las insuficiencias de la vida. Quien
busca en la ficción lo que no tiene, dice, sin necesidad de decirlo, ni siquiera saberlo,
que la vida tal como es no nos basta para colmar nuestra sed de absoluto, fundamento de la condición humana, y que debería ser mejor. Inventamos las ficciones para poder vivir de alguna manera las muchas vidas que quisiéramos tener cuando apenas disponemos de una sola.

Sin las ficciones seríamos menos conscientes de la importancia de la libertad para
que la vida sea vivible y del infierno en que se convierte cuando es conculcada por un
tirano, una ideología o una religión. Quienes dudan de que la literatura, además de
sumirnos en el sueño de la belleza y la felicidad, nos alerta contra toda forma de
opresión, pregúntense por qué todos los regímenes empeñados en controlar la conducta de los ciudadanos de la cuna a la tumba, la temen tanto que establecen sistemas de censura para reprimirla y vigilan con tanta suspicacia a los escritores independientes. Lo hacen porque saben el riesgo que corren dejando que la imaginación discurra por los libros, lo sediciosas que se vuelven las ficciones cuando el lector coteja la libertad que las hace posibles y que en ellas se ejerce, con el oscurantismo y el miedo que lo acechan en el mundo real. Lo quieran o no, lo sepan o no, los fabuladores, al inventar historias, propagan la insatisfacción, mostrando que el mundo está mal hecho, que la vida de la fantasía es más rica que la de la rutina cotidiana. Esa comprobación, si echa raíces en la sensibilidad y la conciencia, vuelve a los ciudadanos más difíciles de manipular, de aceptar las mentiras de quienes quisieran hacerles creer que, entre barrotes, inquisidores y carceleros viven más seguros y mejor.

La buena literatura tiende puentes entre gentes distintas y, haciéndonos gozar,
sufrir o sorprendernos, nos une por debajo de las lenguas, creencias, usos, costumbres y prejuicios que nos separan. Cuando la gran ballena blanca sepulta al capitán Ahab en el mar, se encoge el corazón de los lectores idénticamente en Tokio, Lima o Tombuctú.
Cuando Emma Bovary se traga el arsénico, Anna Karenina se arroja al tren y Julián
Sorel sube al patíbulo, y cuando, en El Sur, el urbano doctor Juan Dahlmann sale de
aquella pulpería de la pampa a enfrentarse al cuchillo de un matón, o advertimos que
todos los pobladores de Comala, el pueblo de Pedro Páramo, están muertos, el
estremecimiento es semejante en el lector que adora a Buda, Confucio, Cristo, Alá o es
un agnóstico, vista saco y corbata, chilaba, kimono o bombachas. La literatura crea una
fraternidad dentro de la diversidad humana y eclipsa las fronteras que erigen entre
hombres y mujeres la ignorancia, las ideologías, las religiones, los idiomas y la
estupidez.


(Fragmento)

jueves, 20 de enero de 2011

MARÍA ELENA, PARA SIEMPRE


Mil gracias, María Elena!!!!!!!
Aún conservo este disco...


Porque crecimos con ella, y aprendimos a cantar sus canciones antes de aprender a escribir. Porque cuando aprendimos a leer y a escribir, nuestros cuadernos se llenaron de flores de jacarandá, de Manuelitas, de sonrisas para bañarse en camisón, de perros salchichas haciendo travesuras por las playas, dispuestas a no aburrirnos como la princesa Sukimuki...Y cuando fuimos adolescentes, seguimos copiando sus poemas de esa edad, admirando su genio. Y de adultos, de adultas, la seguimos cantando, cada vez que resucitamos como la cigarra, convencidas de que nada es mejor que la tierra de uno, ahora con el coro de las voces infantiles de nuestros hijos...


María Elena, imborrable presencia, estás y estarás siempre en nuestras vidas , en nuestros corazones y en nuestros labios...





COMO LA CIGARRA

María Elena Walsh


Tantas veces me mataron,
tantas veces me morí,
sin embargo estoy aquí,
resucitando.
Gracias doy a la desgracia
y a la mano con puñal
porque me mató tan mal,
y seguí cantando.

Cantando al sol como la cigarra
después de un año bajo la tierra,
igual que sobreviviente
que vuelve de la guerra.

Tantas veces me borraron,
tantas desaparecí,
a mi propio entierro fui
sola y llorando.
Hice un nudo en el pañuelo
pero me olvidé después
que no era la única vez,
y seguí cantando.

Tantas veces te mataron,
tantas resucitarás,
tantas noches pasarás
desesperando.
A la hora del naufragio
y la de la oscuridad
alguien te rescatará
para ir cantando.